"En la actualidad, el 87% de las vacunas administradas han ido a parar a los países de renta alta o media-alta, mientras que los países de renta baja sólo han recibido el 0,2% de las vacunas disponibles. Más de 3.200.000 personas han muerto a causa del COVID 19 en el mundo."
Con estos datos rotundos comienza el comunicado que ha hecho público la Compañía de Jesús en el que solicita justicia en la asignación global de las vacunas del COVID-19. En este posicionamiento se hace un repaso de cómo opera la desigualdad, de manera global, pero específicamente en la adquisición, producción y distribución de la vacuna. Países como Estados Unidos o Reino Unido cuentan con promedios de hasta tres vacunas por habitante frente al dato raquítico de vacunas en los países de rentas más bajas.
La Compañía de Jesús expresa su compromiso con las siguientes acciones: (1) Instar a los países que aún bloquean la propuesta de exención temporal de los derechos de patente a que la apoyen, para ampliar y acelerar la producción y distribución de tecnologías, medicamentos y vacunas que salvan vidas. (2) Animar a todos los países a que den prioridad a las personas más vulnerables entre sus ciudadanos en la distribución de vacunas. (3) Instar a los países ricos a suplir las carencias de financiación de la iniciativa COVAX y a compartir los excedentes de vacunas de sus propias reservas (4) Solicitar a las instituciones financieras internacionales y a los acreedores privados que cancelen las deudas de los países de ingresos bajos y medios para que puedan responder a la pandemia y recuperarse de ella.
La Compañía de Jesús seguirá participando de acciones de incidencia que promuevan el acceso universal a la vacuna.
El comunicado ha sido impulsado desde el Secretariado de Justicia Social y Ecología de la Curia de la Compañía en Roma, y firmado por los Presidentes de todas las Conferencias y por los Secretariados de Educación Superior, de Educación Pre-secundaria y Secundaria y de Servicio de la Fe.
Desde su publicación numerosas organizaciones de la Compañía de Jesús nos hemos adherido al mismo en un esfuerzo más por aportar a una respuesta global también en el ámbito de la vacunación. Desde la RJM seguimos insistiendo en que esta garantía de acceso debe considerar a todas las personas, con independencia de su nacionalidad y del territorio en el que se encuentren, y desde luego con independencia de la condición migratoria regular o no en el país en el que se encuentren.
Puedes acceder aquí a la noticia completa publicada por el SJES.
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