Ante las medidas de control implementadas en la frontera entre Ecuador y Perú, desde el pasado 26 de enero, organizaciones de la sociedad civil, entre las que nos encontramos como Red Jesuita con Migrantes, han dirigido una carta a los gobiernos de Ecuador y Perú en la que manifiestan su preocupación ante la militarización de las fronteras y el riesgo que esto conlleva para los derechos humanos de las personas migrantes y refugiadas, y rechazan su criminalización como excusa para frenar la COVID – 19.
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Reconocemos en esta estrategia de militarización una constante, cada vez mayor en las fronteras de todo el continente, exigimos a los gobiernos de los países de Latinoamérica que opten por encarar la realidad migratoria desde un enfoque de derechos humanos y con humanidad.
Foto: DW
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