En el marco de la celebración del Día de San Ignacio, este 31 de julio del 2024, distintas personas de la ciudad de Boa Vista en Brasil, se encontraron y caminaron con quienes han sido forzadas a migrar y así recordar, que cada paso es la esperanza en la búsqueda de un presente y un futuro digno y en paz.
Foto: Vincent Montoya. Boa Vista, Brasil.
La ciudad de Boa Vista en Brasil ha sido la puerta de entrada para cientos de miles de personas forzadas a migrar desde Venezuela durante los últimos años, e igualmente ha sido un lugar de encuentro entre diversidad de organizaciones de la sociedad civil, comunidades religiosas, organismos de las Naciones Unidas, instituciones gubernamentales, organizaciones comunitarias y muchas personas de buena voluntad que suman sus pasos para construir caminos de hospitalidad en medio de situaciones difíciles y de mucha vulnerabilidad para las personas migrantes forzadas y sus familias.
Como una manera de fortalecer y hacer más pertinente la respuesta de la Compañía de Jesús en el Estado de Roraima y la región fronteriza con Venezuela y Guiana, las obras jesuitas y quienes hacen parte de procesos de Iglesia en este territorio, mantienen una dinámica de colaboración llamada Núcleo Apostólico de Roraima, donde participan el Servicio Jesuita a Migrantes y Refugiados, Fe y Alegría, la Pastoral Universitaria, el Área Missionária do Bonfim (frontera con Guiana) y la Misión Indígena Serra da Lua (municipios de Bonfim e Cantá). En el contexto de esta región, al igual que en muchas partes de América, la migración forzada es una de las realidades humanas que invita a esta colaboración desde la creatividad que permita brindar una respuesta común como Iglesia y como sociedad, dando vida a los verbos de acción propuestos por el Papa Francisco para Acoger, Proteger, Promover e Integrar a quienes han tenido que dejarlo todo para comenzar de nuevo. La Compañía de Jesús se suma de esta manera al trabajo de una Iglesia comprometida con la promoción de la hospitalidad, la reconciliación y la cultura de paz, desde donde se puede experimentar que Dios camina con su Pueblo y en su Pueblo.
Foto: Vincent Montoya. Boa Vista, Brasil.
Como parte de las acciones del Núcleo Apostólico de Roraima, las obras jesuitas presentes en Boa Vista, han elegido sumarse a la campaña global Caminos de Hospitalidad impulsada por la campaña Hospitalidad de las obras del Sector Social de los Jesuitas en España, el Servicio Jesuita a Refugiados Europa (JRS Europe), la Red Jesuita con Migrantes de Latinoamérica y Caribe (RJM LAC) y su Campaña por la Hospitalidad, y la Federación Internacional de Fe y Alegría.
El 31 de julio, en el marco de la celebración del día de San Ignacio, han convocado a diversidad de personas que colaboran en obras jesuitas y de la Iglesia Católica, para realizar un gesto sencillo y poderoso: salir a caminar juntas y juntos para experimentar la esperanza que aprendemos con las personas forzadas a migrar en el mundo. Desde la Rodoviaria (estación de autobuses) de la ciudad de Boa Vista, se ha realizado una caminata hasta la Iglesia de la Consolata, sumando los pasos de diversidad de personas que tienen en común la decisión de ser más y mejor humanidad. Como un símbolo de unidad en la diversidad, se han vestido con camisetas de color azul con la frase que es el lema de Caminos de Hospitalidad en el 2024: La esperanza es el camino.
Foto: Vincent Montoya. Boa Vista, Brasil.
Algunas de las personas participantes han decidido asumir otro elemento simbólico que busca recordar la importancia de la construcción de relaciones humanas basadas en la empatía y el reconocimiento de la dignidad de cada persona, para lo cual se han intercambiado un zapato o se han calzado diferentes zapatos para este día. Desde Boa Vista se lanza esta invitación para literalmente “ponerse en los zapatos de la otra persona” y salir a caminar por la hospitalidad que nos permitirá seguir construyendo la amistad social y la revolución del amor.
Foto: Vincent Montoya. Boa Vista, Brasil.
Caminos de Hospitalidad en Boa Vista finalizó con una celebración eucarística en la Iglesia de la Consolata, como un llamado a seguir compartiendo la vida y el camino con las personas forzadas a migrar que siguen dando pasos de esperanza todos los días en Brasil, en América y en el mundo.
Desde Brasil, el Servicio Jesuita a Migrantes y Refugiados, Fe y Alegría, la Pastoral Universitaria, el Área Missionária do Bonfim, la Misión Indígena Serra da Lua, las Hermanas Franciscanas Misioneras de la Madre del Divino Pastor, las familias migrantes forzadas que se encuentran en la Casa de Passagem P. José María Vélaz S.J (Fe y Alegría) y distintas personas que se sumaron a esta caminata, nos invitan a sumarnos a la campaña global Caminos de Hospitalidad: La Esperanza es el Camino.
Foto: Vincent Montoya. Boa Vista, Brasil.
Desde la dimensión de hospitalidad de la Red Jesuita con Migrantes Continental, queremos agradecer a todas las personas que hicieron posible esta actividad en Boa Vista. Con su ejemplo, queremos seguir construyendo Caminos de Hospitalidad en todo el continente.
Para sumarse en esta campaña visite el sitio Caminos de Hospitalidad.
Fecha de publicación: 1 de agosto de 2024 – Hospitalidad.
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