El Miércoles 21 de Abril ha sido lanzado publicamente el Informe Situacional Otoño 2021 del Servicio Jesuita a Migrantes ARU. En este documento se presenta la realidad de las poblaciones migrantes, refugiadas y solicitantes de asilo en Argentina, se señalan los impactos de la Pandemia de COVID-19 en ellas y ellos, y se describe la respuesta ofrecida por el Servicio Jesuita a Migrantes.
Desde la Red Jesuita con Migrantes celebramos este esfuerzo del equipo del SJM en la Provincia ARU, que demuestra el compromiso de todas las personas que colaboran en el apostolado de la Migración Forzada en cada uno de los territorios donde en tan poco tiempo ha desplegado su servicio el SJM.
Se trata del primer informe situacional del Servicio Jesuita a Migrantes de Argentina y Uruguay, resultado del acompañamiento cercano a las personas en situación de movilidad. “También es producto de lo que consideramos un mandato para nosotros; pues entendemos que como Iglesia, Compañía de Jesús, y Servicio Jesuita a Migrantes, la problemática de las personas que migran merece una reflexión detenida, desde el conocimiento cercano de sus historias de vida, sus necesidades concretas, y el dolor que muchas de ellas han tenido que experimentar en su trayectoria de movilidad” afirma Julio A. Villavicencio S.J. quien es el director de esta obra jesuita.
“En él damos cuenta de la situación de personas en trayectorias (casi siempre forzadas) de movilidad internacional, así como de nuestra respuesta organizacional en el contexto de emergencia.” SJM ARU.
El informe permite reconocer los efectos y desafíos generados por la irrupción de la pandemia de COVID-19, con el propósito de advertir sus fuertes impactos sobre grupos poblacionales que, en el marco de experiencias variadas de movilidad, ya se encontraban en una situación social, económica y jurídica vulnerable.
“La crisis provocada por la pandemia del covid 19 ha dejado a la luz –entre otras cosas- que los enunciados políticamente correctos de nuestra sociedad han mostrado su inconsistencia en la práctica. Los marginados de siempre han quedado más al margen aún, los empobrecidos han aumentado y entre ellos, los migrantes y refugiados han sido de los colectivos más afectados: son ellos, por ejemplo, los primeros que han sido despedidos del mundo laboral y fueron arrojados de sus alojamientos. Con ellos las políticas públicas han mostrado su insuficiencia. La injusticia estructural se reproduce si no hacemos algo para evitarlo. Este informe del Servicio Jesuita al Migrante (SJM) da cuenta de ello.”
Rafael Velasco, SJ, Provincial en la Provincia ARU.
“Era migrante y ustedes me acogieron” (Mt. 25, 35)
En medio de una crisis insólita el Servicio Jesuita al Migrante ha hecho grandes esfuerzos de acogida, alimentación, alojamiento, documentación y orientación. El informe refleja los intentos por dar respuesta a una realidad doliente dando la cara y no escondiéndose detrás del anonimato impersonal en el que a veces naufragan organizaciones con propósitos nobles. Ese tal vez es uno de los aprendizajes más importantes.
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